miércoles, 28 de abril de 2010

Por el color de su corbata les conoceréis, la opinión de Ignacio Martín Granados

Ignacio Martín Granados Ignacio Martín Granados, Director del Gabinete de Alcaldía del Ayuntamiento de Segovia y profesor asociado de la Facultad de Ciencias Sociales, Jurídicas y de la Comunicación de la Universidad de Valladolid, nos ofrece su opinión sobre el uso de las corbatas en las elecciones británicas.

“Una corbata bien anudada es el primer paso serio que suele dar un hombre en la vida”
Oscar Wilde (1891)


El próximo 6 de mayo se celebrarán elecciones generales en el Reino Unido. Unos comicios que han venido precedidos de la aplastante ventaja en las encuestas del candidato conservador, David Cameron; el posterior recorte de la misma por parte del aspirante laborista y actual primer ministro, Gordon Brown; y la sorprendente irrupción del candidato liberal demócrata, Nick Clegg, en una carrera pensada para dos finalistas que ha obligado a los candidatos bipartidistas a cambiar sus estrategias.

En estas elecciones la principal novedad ha sido la celebración de tres debates televisados, por primera vez en la historia del Reino Unido, entre los tres principales candidatos. Sin duda, el elemento que más ha ayudado a animar una campaña que parecía predeterminada de antemano y cuyo resultado, tras la consulta de las urnas, ahora es toda una incógnita, gracias también al sistema electoral británico.

El primer debate televisado -sobre política doméstica- tenía lugar el pasado 15 abril, en Manchester y fue retransmitido por la cadena ITV. El segundo fue el 22 abril, desde Bristol y emitido por la cadena Sky, con la política internacional como protagonista. Finalmente, el tercero tendrá lugar el jueves 29 y, retransmitido por la BBC, abordará el asunto más candente de la campaña, la economía.

Muchos han sido los análisis que se han realizado de los debates, los programas electorales, los perfiles personales y profesionales de estos tres candidatos e incluso de las futuras primeras damas. Sin embargo, me gustaría detenerme en un elemento quizá secundario, pero sin duda, crucial para la identificación de los candidatos, que no es otro que la simbología del color.

Tampoco se trata de un tema baladí ya que los diferentes complementos que completan la indumentaria del candidato juegan un papel determinante en la imagen y apariencia que el político irradie en la televisión, teniéndose en cuenta según los decorados televisivos, el tipo de comparecencias públicas, etcétera.

candidatos
“Los tres candidatos en el primer debate televisado en ITV”


Anótese el detalle de presentación de los candidatos con el color partidista del decorado rigurosamente a juego con la corbata

En este caso, vamos a detenernos en las corbatas. Una corbata no es un complemento más sino que nos dice mucho de quien la lleva. Es un símbolo de carácter que puede reflejar la personalidad de un hombre o el estado de ánimo de su propietario.

Los candidatos, en los dos debates celebrados hasta la fecha, han utilizado la misma gama cromática, identificándose con los colores de sus partidos, repitiendo dicho color siempre que tienen ocasión en sus actos públicos. Esto es, Gordon Brown en tonos rosáceos y roja, David Cameron azul y ligeramente morada y Nick Clegg amarilla-dorada.

Los candidatos mantienen el color de la corbata y trajes similares pese al cambio de escenario

Si visitamos sus respectivas páginas webs comprobaremos como estos colores son los tonos oficiales, y han seguido ese corporativismo en el color de sus corbatas. En cualquier caso, tampoco se han salido del guión de uso histórico de colores según la identificación partidista. En la mayoría de los países europeos el amarillo se asocia a los partidos liberales, el azul se vincula generalmente a la derecha política y partidos conservadores, y el rojo lo identificamos con los partidos socialistas, de donde procede el partido laborista.

Si hacemos caso a la simbología del color, el amarillo es el color más intelectual y puede ser asociado con una gran inteligencia o con una gran deficiencia mental. Este primario significa envidia, ira, cobardía, y los bajos impulsos, y con el rojo y el naranja constituye los colores de la emoción. Es el color de la luz, el sol, la acción, el poder y simboliza arrogancia, oro, fuerza, voluntad y estimulo. Los amarillos también suelen interpretarse como joviales, afectivos, excitantes e impulsivos. Están relacionados con la naturaleza y psicológicamente se asocia con el deseo de liberación.

Al color rojo se le considera con una personalidad extrovertida, que vive hacia afuera, tiene un temperamento vital, ambicioso y material, y se deja llevar por el impulso, más que por la reflexión. Simboliza sangre, fuego, calor, revolución, alegría, acción, pasión, fuerza, disputa, desconfianza, destrucción e impulso, así como crueldad y rabia. Es el color de los maniáticos y el de los generales y los emperadores romanos y evoca la guerra, el diablo y el mal. Expresa sensualidad, virilidad y energía, considerado símbolo de una pasión ardiente y desbordada. Por su asociación con el sol y el calor es un color propio de las personas que desean experiencias fuertes.

El color azul simboliza la profundidad inmaterial y el frío. Se lo asocia con los introvertidos o personalidades reconcentradas o de vida interior y está vinculado con la circunspección, la inteligencia y las emociones profundas. Es el color del infinito, de los sueños y de lo maravilloso, y simboliza la sabiduría, amistad, fidelidad, serenidad, sosiego, verdad eterna e inmortalidad. También significa descanso. Respecto al violeta, es el color de la templanza, la lucidez y la reflexión. Transmite profundidad y experiencia. Tiene que ver con lo emocional y lo espiritual. Es místico, melancólico y se podría decir que también representa la introversión.

Tras este análisis cromático, no exento de otros análisis, ¿coincide con el estudio de las personalidades de los candidatos? Veamos. Gordon Brown, al contrario que su predecesor en el cargo, Tony Blair, no es un líder carismático. Es un buen político y gestor pero carente de imagen y falta de liderazgo, con problemas de salud (molestias en la espalda, pérdida de visión en un ojo y serios problemas en el otro) que no le configuran como un buen candidato. David Cameron es telegénico, un hombre joven, representa el deseo de cambio que tiene la sociedad británica, pero tiene que demostrar que es un buen político, o que puede serlo. Lo que le falta a Cameron le sobra a Brown y viceversa. Y, finalmente, Nick Clegg, es la estrella emergente. calificado como el "Obama británico", le gusta presentarse como una persona moderna y sencilla. Telegénico, políglota, el más europeo y joven de los dirigentes de los partidos principales británicos.

Es cierto que en periodo electoral se estudia hasta el más mínimo detalle y sobre todos ellos se escriben ríos de tinta, pero de lo que no cabe duda es de que frente a la deriva de desafección política, nuevos aires han refrescado el clima político que han devuelto el interés por la política en las islas. Además, los candidatos saben que en la micropolítica, la política de las emociones, la conexión con el ciudadano es fundamental y aunque estas elecciones parecen haber situado a los candidatos por encima de sus partidos cuando históricamente siempre ha sido al revés, éstos siguen manteniendo bien presente sus vínculos identificativos utilizando a la más mínima ocasión sus colores corporativos reforzando su identidad partidista. ¿Repetirán los candidatos el color de su corbata este jueves?.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante artículo que, efectivamente, aborda un aspecto poco analizado pero revelador, acerca de los candidatos.

Anónimo dijo...

Excelente artículo! Lo republicaremos en e-lecciones.net citando la fuente original.
Saludos

Publicar un comentario